Los ataques que está sufriendo la educación
pública son continuos, tanto en Castilla-La Mancha como en el conjunto del país,
fruto de la conjunción de los ataques del gobierno central y los gobiernos
autonómicos. Como respuesta a estos ataques, la Comunidad Educativa educativa
tiene que seguir luchando en la calle. Para hacerlo, hemos convocado una
jornada de lucha el 13 de Diciembre en todo el país.
En Castilla-La Mancha, la última ocurrencia de
nuestra Consejería es ofertar cursos de formación que servirán para tener
trabajadores sin abonarles un salario y no cubrir así las bajas del
profesorado.
A esto tenemos que sumarle los continuos recortes
que degradan día tras día la educación pública, ésa que tanto nos costó
conseguir.
El Ministerio de Educación ha puesto sobre la
mesa un anteproyecto de ley educativa, la LOMCE, una ley represiva,
que nos retrotrae a una época franquista. Ésta es una ley
segregadora, antidemocrática, donde la libertad de elección de centro
nos lleva a una privatización encubierta de la educación pública; donde
el Consejo Escolar pierde su capacidad decisoria y todo el poder se traspasa
a manos del director, que podría llegar a decidir, con nombres y apellidos,
quiénes trabajan en su centro, y, a través de la evaluación de los docentes,
podría tener en sus manos las retribuciones del profesorado.
Es una ley que contiene una gran carga
ideológica neoliberal, que deja de entender la educación como un derecho
universal que el estado tiene la obligación de garantizar en condiciones de
calidad a través de una red de centros de titularidad pública, pasando a
considerarla como un bien sujeto a la oferta y la demanda y que podrá ser
proporcionado indistintamente por centros privados o públicos, limitándose éstos
últimos a proporcionar unos mínimos que, quien pueda permitírselo, podrá
complementar pagando a centros privados sostenidos, eso sí, con fondos públicos.
Idéntica carga ideológica tienen la
concertación de colegios que segregan al alumnado en función de su sexo,
la cesión a las presiones de la iglesia católica para afianzar la clase de
religión, reservando la educación en valores cívicos para aquellos alumnos
que no la escojan, los continuos ataques del gobierno central y de los gobiernos
autonómicos al uso de la lengua propia como eje vehicular de la enseñanza
en cada territorio, o el endurecimiento de las condiciones para la obtención de
los títulos académicos y el acceso a la universidad de los hijos e hijas de la
clase trabajadora debido a la subida demencial de las tasas
universitarias.
Esta ley es una imposición que nace sin debate
y sin un diagnóstico previo, nace para consolidar los recortes, sin consulta
a la comunidad educativa, que somos quienes hemos de soportar sus
ataques.
Es imprescindible que la sociedad, en su
conjunto, y la comunidad educativa, en particular, seamos conscientes de la
vuelta de tuerca que supone esta contrarreforma.
Esta ley supone una
pérdida del derecho a la educación, a una educación pública de calidad,
que garantice el derecho a la equidad social.
Por si fuera poco,
nos quieren callar con medidas represivas, con
amenazas y con coacciones, pero no nos vamos a callar, vamos a seguir
luchando en todos los escenarios: en los
colegios,, institutos, universidades, en las Ampas y en la
calle.
No nos vamos a
rendir hasta que consigamos derogar y tumbar estas leyes que atentan contra
las personas, contra su formación y sus oportunidades.
Vamos a seguir defendiendo una Educación Pública, de Calidad,
Laica y Democrática
13 DE
DICIEMBRE
ALBACETE: 18:00 H PLAZA DEL ALTOZANO
CIUDAD REAL Y CUENCA: 18:00 H FRENTE A LOS
SERVICIOS PERIFÉRICOS DE EDUCACIÓN.
GUADALAJARA: 19:00 H FRENTE A LOS SERVICIOS
PERIFÉRICOS DE EDUCACIÓN (PLAZA DEL JARDINILLO)
TALAVERA: 17:30 H PLAZA DE LA
TRINIDAD
TOLEDO: 18:00 H PLAZA DE ZOCODOVER
TOLEDO: 18:00 H PLAZA DE ZOCODOVER